Última actualización:
October 21, 2020
Años publicados: 1997, 2001, 2002, 2007, 2020
NORD agradece a Henry (Hedi) Zhao, candidato a MDCM, Facultad de Medicina de la Universidad McGill, y a Raoul C.M. Hennekam, MD, PhD, Profesor Emérito de Pediatría y Genética Traslacional, Departamento de Pediatría, Amsterdam UMC, Ámsterdam, Países Bajos, por su ayuda en la preparación de este informe en inglés. El informe en inglés fue traducido al español y modificado por Gioconda Alyea, médica genetista brasileira, el 29 de enero del 2024.
El síndrome de abléfaron-macrostomía (AMS) es un trastorno genético poco común caracterizado por párpados ausentes o poco desarrollados (ablefaron o microblefaron) y una boca ancha (macrostomía) y rara vez afecta a los órganos internos (vísceras).
Otras señales y síntomas comunes son orejas de implantación baja con lóbulos adheridos, fusión de los dedos (sindactilia), flexión permanente de los dedos (camptodactilia), pómulos poco desarrollados (hipoplasia malar), pezones ausentes o muy pequeños, piel arrugada y redundante, cabello ausente o escaso y malformaciones genitales. También puede haber, con menos frecuencia, anomalías umbilicales, retraso en el crecimiento y discapacidad intelectual.
El síndrome de abléfaron-macrostomía hace parte de un grupo de enfermedades llamadas displasias ectodérmicas (trastornos genéticos que involucran defectos en la piel, el cabello, las uñas, las glándulas sudoríparas y/o los dientes), pero debido a que muchas características involucran tejidos que no se derivan del ectodermo, algunos piensan que sería mejor definirlo como un síndrome separado único
El síndrome de abléfaron-macrostomía es causado por cambios (mutaciones o variantes patogénicas) en el gen TWIST2.
La herencia es autosómica dominante pero la mayoría de los casos surgen como mutaciones espontáneas, por lo que ocurren de forma esporádica, sin ser heredadas de los padres.
Las mutaciones en el gen TWIST2 también causan otras enfermedades, el síndrome de Barber Say y el síndrome de Setleis, que tienen características muy similares. De hecho, algunos investigadores han sugerido que los tres trastornos hacen parte de la misma condición y forman un continuo.
El síndrome de abléfaron-macrostomía se describió originalmente en 1977 en dos niños no emparentados. Se han logrado avances en las técnicas quirúrgicas que mejoran la función visual y la apariencia cosmética.
El síndrome de abléfaron-macrostomía es evidente al nacer por las características de la cabeza y la región facial (craneofacial). Las señales y los síntomas son variados y quizás no se conozcan todos, ya que hay relativamente pocos casos y las presentaciones varían en gravedad de persona a persona.
Las características principales incluyen:
Otras señales y síntomas comunes son:
Otros rasgos craneofaciales característicos adicionales que pueden incluir:
El síndrome de abléfaron-macrostomía es causado por cambios (mutaciones o variantes patogénicas) en el gen TWIST2. La proteína fabricada (codificada) puede inhibir la maduración de las células de los huesos.
Herencia
La mutación en el gen TWIST2 a menudo se produce de forma espontánea en la persona afectada, sin ser heredada de los padres, pero hay casos en que se ha heredado de uno de los padres en un patrón autosómico dominante.
Los trastornos genéticos dominantes ocurren cuando solo se necesita una copia de un gen mutado para causar una enfermedad en particular. El gen mutado puede heredarse de cualquiera de los padres o puede ser el resultado de una mutación en el gen de la persona afectada. El riesgo de transmitir el gen mutado de un padre afectado a un hijo es del 50% por cada embarazo. El riesgo es el mismo para hombres y mujeres.
Entre 1977 y 2020, ha habido 16 casos documentados de síndrome de abléfaron-macrostomía en la literatura y una prevalencia mundial de menos de <1/1.000.000. No existe aparente disparidad étnica o sexual, y hombres y mujeres presentan signos y síntomas similares.
Se puede sospechar un diagnóstico de síndrome de abléfaron-macrostomía al nacer basándose en una evaluación clínica, una historia familiar y de la paciente detallada y la identificación de hallazgos físicos característicos.
Por lo general, un diagnóstico confiable sólo es posible por motivos clínicos. A veces puede resultar difícil diferenciarlo del síndrome de Barber Say y del síndrome de Setleis.
El diagnóstico clínico puede confirmarse mediante pruebas genéticas moleculares para detectar mutaciones en el gen TWIST2.
Pruebas clínicas y análisis
La tomografía computarizada (TC) puede ser útil para demostrar la ausencia del arco cigomático y la unión inadecuada de porciones de los maxilares superior e inferior (prominencias maxilar y mandibular), aunque esto rara vez tendrá consecuencias para el tratamiento. Los oftalmólogos pueden realizar exámenes exhaustivos y pruebas especializadas para caracterizar adecuadamente las características de los párpados, detectar cualquier anomalía ocular adicional o asociada y garantizar las medidas preventivas o el tratamiento adecuados.
El tratamiento actualmente aceptado es la cirugía correctiva y reconstructiva para preservar la visión y reducir las complicaciones visuales como la opacificación corneal durante el período neonatal.
Proporcionar terapia de apoyo, como gotas lubricantes para los ojos desde el principio, puede mejorar los síntomas de sequedad ocular.
La cirugía adicional a una edad posterior puede tener como objetivo mejorar la función y la apariencia. El ectropión severo y el subdesarrollo de los párpados se tratan con la transferencia de colgajos de piel a la región del párpado, mejorando así la capacidad de cerrar los ojos. Una posible complicación de este procedimiento es la imposibilidad de cerrar completamente los ojos (lagoftalmos).
También se puede realizar una cirugía correctiva en los dedos, la piel o las orejas, pero existe evidencia mínima que lo respalde. Estos procedimientos quirúrgicos incluyen colgajos locales, procedimientos de estiramiento facial, levantamiento de frente, inyecciones de Botox, injertos de grasa, cirugía ortognática y reconstrucción nasal con injertos de cartílago costal. Estos procedimientos pueden ser más riesgosos en personas más jóvenes porque el crecimiento craneofacial puede verse afectado.
El apoyo psicosocial a los niños con síndrome de abléfaron-macrostomía también es importante a medida que crecen y enfrentan las presiones sociales relacionadas con la apariencia física.
Puede ser importante que las personas afectadas reciban atención de un equipo de varios especialistas médicos, incluyendo especialistas en salud mental, ya que pueden ofrecer atención tanto para los aspectos médicos como psicosociales de la afección.
La cirugía correctiva puede ayudar también con la autoestima pues mejora el aspecto facial. Es importante resaltar que la enfermedad, en general, no afecta las capacidades intelectuales y físicas ni la capacidad para tener una vida productiva según el propio testimonio de varias personas afectadas.
Se recomienda asesoramiento genético a las personas afectadas y sus familias para comprender la genética y la historia natural del síndrome de abléfaron-macrostomía y brindar apoyo psicosocial.
El sitio en la red de Clinical Trials, desarrollado por los Institutos Nacionales de la Salud, proporciona información sobre las investigaciones clínicas. Usted puede ver las investigaciones sobre esta enfermedad en el siguiente enlace: Clinicaltrials.gov. Use el término “Ablepharon-Macrostomia Syndrome” para ver los estudios disponibles. Recomendamos que comparta esta información con los médicos para que analicen los estudios y determinen la indicación de la participación en algún estudio. (en inglés)
Para obtener información sobre los ensayos clínicos en Europa, póngase en contacto con: Clinicaltrialsregister.eu.
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Ablepharon macrostomia syndrome. Orphanet. Updated November 2014. https://www.orpha.net/consor/cgi-bin/Disease_Search.php?lng=EN&data_id=1247.
Usted puede aprender más sobre esta enfermedad en los siguientes sitios en la red:
Las siguientes fuentes de información en inglés también pueden ser de utilidad:
Vea también nuestra página en inglés de NORD: Ablepharon-Macrostomia Syndrome.
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